Todos los años por estas fechas, en la intimidad de la psicoterapia, el espacio se llena del tema navidades, y que como ya no está mi ser querido, o tengo ansiedad, o estoy con depresión, o enfermo, no tenemos ganas de nada. Muchas personas están pasando un mal momento y hay muchos motivos por los cuales mucha gente no la vive con alegría. El principal motivo es porque el sentimiento de alegría e ilusión no está muy presente en estos momentos, por el motivo que sea:
Si estás en duelo por el fallecimiento de un ser querido, estas fechas son especialmente difíciles debido a la naturaleza familiar y social. Estos días se siente mucho más la ausencia.
Te pongo algunos consejos que pueden acompañarte a estar mejor.
- Acepta tus emociones
Es normal sentir tristeza, nostalgia o incluso culpa por disfrutar ciertos momentos. Permítete sentir lo que necesitas, sin juzgarte. Deja un espacio para llorar si lo necesitas.
- Crea un espacio para el recuerdo
A muchas personas les ayuda honrar la memoria de esa persona con una tradición especial, como encender una vela, escribirle una carta o incluir algo simbólico en la decoración navideña. Hablar sobre la persona resaltando las cualidades buenas y el amor. Hay personas que evitan esto. Si no lo puedes sostener sol@, te invito a que busques y encuentres algún espacio o personas donde poder hacerlo y sentirte segur@, ya que lo que no se expresa o no se gestiona puede aparecer más adelante intensificado y en definitiva, suele enfermarnos de alguna manera.
- Adapta las tradiciones a la nueva situación
No sientas presión de seguir con todas las tradiciones si estas resultan demasiado dolorosas. Crea nuevas formas de celebrar que te traigan paz. Puedes quedar con amigos, hacer algo diferente. Parear por la ciudad o por el campo el día 24 o 25 es un ejemplo. Aunque puede que prefieras mantener ciertas costumbre, pero siempre, hazlo de manera consciente.
- Rodéate de gente de apoyo
En estas fechas, comparte tiempo con personas que entienden tu duelo y respeten tus emociones. Lejos de tantos compromisos (sólo los ineludibles), selecciona aquellas interacciones que te van a aportar compañía agradable. Sentir el cariño de otras personas, de las personas que sí están, es muy importante.
- Cuida de ti mismo
Sigue manteniendo una rutina saludable para mantener tu equilibrio psicofisiológico. Come equilibrado, descansa lo suficiente. Normalmente, duelo puede drenar tu energía vital.
Dedica tiempo a actividades que te brinden paz, como leer, pasear, practicar meditación o algún hobby como coser, algún deporte, tocar un instrumento, ebanistería, bricolaje, etc.
- Enfócate en lo que puedes controlar
Las fiestas pueden sentirse abrumadoras, pero no tienes que cumplir con todas las expectativas. Decide qué compromisos son manejables para ti y cuáles no. Atrévete a decir “no” si este año no te viene bien una determinada quedada o un juego.
- Conecta con la parte amorosa o espiritual en lo más profundo de tu corazón
Para ello has de dejar un tiempo para reflexionar sobre lo que tu ser querido significaba para ti y cómo sus valores, enseñanzas a través de lo que vivirte con el/ella pueden inspirarte a seguir adelante.
Enfócate en el amor que compartiste y busca formas de extender ese amor hacia otros.
En definitiva, puedes pegarle un mazazo a expectativas y «deberías» en estas fechas y puedes permitirte vivirlo de una nueva manera, acorde a cómo estás en el momento presente porque en definitiva, lo que es saludable es conectarte con la vida y cómo quieres vivirla, sabiendo que el amor de la persona que ya no está, sigue como una llama en tu corazón.