¿Qué es la psicoterapia?

La psicoterapia es un espacio de seguridad en el que poder equilibrar aquellos aspectos de nosotros mismos y de nuestra vida que nos impiden vivir una vida plena y feliz. A través de una buena relación de confianza con la terapeuta, el diálogo y algunos ejercicios prácticos, se consiguen grandes mejoras. Sobretodo, es una escuela, un lugar y tiempo de aprendizaje, en el que a través de la toma de conciencia se pueden tomar nuevas decisiones ante los mismos problemas.

Hay muchos enfoques de terapia psicológica, que al fin y al cabo, se enfocan en la salud mental. En mi caso utilizo la orientación humanista e integral, en la que tomo al paciente como centro de la terapia, adaptando el trabajo a sus necesidades, en lugar de que el paciente se adapte a mi método. Reforzaremos las partes más sanas de la personalidad y de ellas mismas coger la fuerza para trabajas los aspectos menos equilibrados.

Dentro de las terapias humanistas la que más utilizo es la Terapia Gestalt, por ser una psicoterapia muy abierta y centrada en la persona. Sus principios básicos son

  1. La toma de conciencia (de mis mecanismos de defensa, de mis necesidades, de cómo me relaciono con los demás, cuáles son mis dificultades reales, quien soy)
  2. La responsabilidad en uno mismo. Asumir las consecuencias de tus actos es un acto de madurez y crecimiento personal, ya sean consecuencias positivas como adversas.
  3. Aquí y Ahora. Una de las mayores dificultades que todos tenemos es poder estar realmente conectado con el presente, nadie nos lo ha enseñado y vivimos en un mundo que nos empuja a estar todo el tiempo en el futuro (ansiedad) o en el pasado (depresión).

Normalmente la mayoría de los pacientes que recibo en consulta suelen tener como demandas superar la ansiedad, salir de la depresión, problemas de dependencia emocional, problemas relacionales o algún trastorno de salud mental, pero en otras ocasiones, atiendo a personas que quieren cambiar algunos aspectos de su personalidad o de su vida que no les permiten ser felices. No hace falta tener un trastorno ni estar mal para acudir a psicoterapia.

Bajo mi punto de vista, el objetivo transversal de la terapia psicológica es aprender a amarse a una/o misma/o y a los demás de una manera sana, libre y equilibrada y por tanto mejorar la autoestima. Encontrar paz interior y desarrollar resiliencia y fuerza para los momentos duros de la vida es la herramienta más importante que te puedes regalar a ti misma así como a tus hijos/as.

Detrás de una crisis existencial o un bache personal siempre hay un lección que te toca aprender o quizá un cambio necesario al que te resistías por miedo, para finalmente transformarte en la mejor versión de ti misma/o.

Para más información y preguntas, contacta conmigo!!